lunes, 21 de enero de 2013




Pronto hará un mes y medio que estoy aquí en China, me quedan casi seis meses más. Algunas personas lo llaman locura. Dejar atrás ciertos objetivos para intentar alcanzar otros a unos 11.400 km de distancia no deja de ser un impulso algo imprudente. Al fin y al cabo es una decisión que llegué a considerar como positiva, y así lo está siendo. Conocer otra cultura, otro país, muchas ciudades, diferentes personas, diferentes maneras, diferencias ajenas a lo antes vivido... Esto me enriquece. Y a pesar de haber dejado atrás mucha gente a la que quiero y voy a seguir pensando día a día, y unos objetivos, los cuales espero terminar cumpliendo, decidí tomar este aliento para continuar viviendo. 

"La vida, para poder ser llamada "vida" , tiene que ser trabajada. Tiene que ser el perfecto equilibrio entre la cordura y la locura. De la decencia con la incoherencia. Del fuego con el viento. 
Porque todos mueren, pero no todos viven".