martes, 12 de febrero de 2013



Pensaba que iba a tener más tiempo para escribirte. A la falta de tiempo se suman las restricciones de uso de internet que este país supone, pero no a ello la adición de dejar de reflexionar sin un teclado y una pantalla donde plasmar mis reflexiones. En estos meses he descubierto mucho, me voy descubriendo como dije, un poquito más a mi misma y a todos y todo lo que me rodea. Voy ordenando pensamientos en cada viaje. Durante dos meses entre cielo, railes y asfalto recorriendo diferentes ciudades del país, podría decir que me quedo con la carretera y sus largas horas en furgoneta, éstas me han enseñado mucho más. Es un país que, como la vida misma, a veces despliega caos y desorden, pero que a su vez llega a transmitir una gran armonía. Me gusta explorarlo. Me gusta este cambio. Pero anhelo todo lo demás, sin querer desmerecer todo lo que tengo.